Soy Olga…. Fui médico abortista… Trabajé en una clínica de aborto desde el año 2015 cuando llegué a España. En la clínica donde trabajé habían abortos farmacológicos y abortos quirúrgicos por aspiración uterina.
Médico abortista arrepentido. Transcripción de la entrevista a Olga, por cortesía de ABOGADOS CRISTIANOS.
Habían irregularidades muy graves. Hubo muchas ocasiones en que se otorgaba un tratamiento abortivo farmacológico a pacientes que no estaban embarazadas. Por ecografía no se localizaba el embarazo.
Se abusaba de la desesperación de la mujer, de la sospecha de que podía estar embarazada y se le daban los fármacos, aún sin constatar el embarazo.
La auxiliar de enfermería daba consulta médica de aborto farmacológico. Daba seguimiento médico a las pacientes, vía telefónica o por WhatsApp del proceso farmacológico. El fármaco que daba la auxiliar de enfermería era la Mifepristona, que solamente lo puede recetar un médico, pero lo daba. Además, la auxiliar hacían ecografías y la historia clínica…. Pensaba que era la médico.
A toda paciente se le decía que eran fármacos muy inocuos, que iban a tener como una regla, pero no era así. Son fármacos que pueden ocasionar hemorragias uterinas muy graves. Se le daba medicación a toda paciente en un sobre y se lo llevaba a su casa. Es una medicación que se debería de tomar en una clínica porque pueden ocasionar hemorragias muy graves y hacer que una paciente vaya a una sala de urgencias. A las pacientes con abortos quirúrgicos, se les decía que todo estaba bien. Se las enviaba a casa. Se les decían que si tenían dolor tomara medicación y ya no se las volvían a citar.
Había mucho fraude con los pagos en efectivo. Era dinero negro. Era dinero que no se reportaba a Hacienda. Las historias clínicas, se deshacían de ellas. Se deshacían de cualquier indicio que una paciente se atendió en esa clínica.
Siempre se me presionó para hacer abortos quirúrgicos sobre el aborto farmacológico. Una cánula de aspiración y un poco de medicación tenía un costo de alrededor de 8 euros, comparado con un método farmacológico, donde la principal medicación que es la Mifepristona o Mifegyne, se gastaba alrededor de 80 a 100 euros.
Para evitar gastar en lo farmacológico, siempre se presionaba para que toda paciente, aunque estaba indicado el método farmacológico, se tratará de hacer el método quirúrgico por lo barato del método.
Si tenía alguna duda, siempre la auxiliar de enfermería se encargaba de convencerla con decirle que era lo mejor, que si ya lo había pensado, que era lo correcto…… ¡Es un negocio el aborto!
Fui médico abortista de lo cual ahora….. me arrepiento mucho. Son…. muchos traumas que se generan. La gente no lo sabe porque las pacientes….. se sienten con ese derecho, pero delegan mucho trauma. También a los médicos que lo hacen. Estoy segura que no solo me pasa a mí, le pasará a muchos.
Un embarazo donde tú ya ves un feto…, un embarazo de más de 9-10 semanas, que ya se ven extremidades… es algo muy traumático…. Si las mujeres vieran eso, no se harían abortos.
Yo creo que más del 90% de las pacientes que yo he atendido no tenían justificación para un aborto. Una mujer que atiendo 4, 5 o 6 veces, no puede decir que es un descuido, no puede decir que tiene el derecho abortar 6 u 8 veces.
Se notará un poco hipócrita porque estuve 8 años trabajando ahí, pero te ciegas cuando estás ahí. Cuando estás fuera ya lo ves…
Aún me siento muy, muy culpable de todos los abortos que realicé, mucho…. Me siento muy culpable….. No tengo hijos…. y yo siento que no tengo derecho a tener hijos.
Si las administraciones dieran más apoyo a una mujer embarazada y se les diera a conocer esos apoyos, estoy segura que no optarían por el aborto porque muchas abortan por problemas económicos…..
La labor de Abogados Cristianos es muy importante y por eso me puse en contacto con ellos porque todas las mujeres deberían saber lo que es este negocio del aborto.