ReL. Qué Santiago celebramos, el Mayor o el Menor?
¿Fue el apóstol Santiago uno de los discípulos predilectos de Jesús?
¿Cómo fue la presencia de Santiago en España?
¿Evangelizó Santiago España?
¿Cómo murió el apóstol Santiago?
¿Cómo llegaron los restos de Santiago a España?
¿Cómo comenzó el Camino de Santiago?
¿Desde cuándo y por qué es Santiago patrono de España?
¿Qué papel tuvo Santiago en la Reconquista y en la batalla de Clavijo?
¿Escribió Santiago el Mayor la Epístola de Santiago del Nuevo Testamento?
¿Qué Santiago celebramos, el Mayor o el Menor?
Una de las dudas más habituales es cuál de los dos discípulos de Jesús llamados Santiago está enterrado en España y fue el evangelizador de esta nación. El 25 de julio se da culto a Santiago el Mayor, patrón de España, denominado así porque era el de mayor edad. Era hermano de San Juan, apóstol y evangelista. Estos dos hermanos eran hijos de Zebedeo y Salomé. Y ellos dos más Pedro fueron considerados los discípulos predilectos de Jesús, pues sólo llamó a los tres para momentos como la Transfiguración o la oración en el huerto de Getsemaní. Por su parte, Santiago el Menor era hijo de Alfeo, llamado también Cleofás y de María, y pariente de Jesús. Es considerado por San Pablo como líder de la comunidad de Jerusalén y una de las columnas. Es además, Santiago el Menor el autor de la Carta de Santiago que recoge el Nuevo Testamento.
¿Fue el apóstol Santiago uno de los discípulos predilectos de Jesús?
Jesús eligió a doce discípulos para que le acompañaran durante su misión hasta que finalmente llegó su pasión, muerte y resurrección. Sin embargo, según aparece en distintos relatos de los Evangelios con tres de ellos tenía una relación de predilección, los cuales pudieron acompañarle en momentos de mayor intimidad. Estos tres discípulos fueron Pedro, Santiago el Mayor y su hermano Juan. Los tres vivieron con Jesús situaciones excepcionales como la resurrección de la hija de Jairo, la Transfiguración de Cristo en el monte Tabor, el anuncio de la destrucción de Jerusalén y la oración en el Huerto de los Olivos.
Santiago, durante la batalla de Clavijo, de Francisco Rizi (Retablo en la parroquia de Santiago y San Juan Bautista de Madrid)
¿Cómo fue la presencia de Santiago en España?
Tras resucitar, Jesús se apareció a los discípulos y les envió a proclamar la Buena Nueva a todos los rincones. Tras recibir el Espíritu Santo, Santiago llegó a la península ibérica, entonces una provincia romana llamada Hispania. Allí empezó a evangelizar a sus gentes, pero sin un aparente éxito inicial. Cuenta la tradición que desanimado porque no se acogía el Evangelio se le apareció la Virgen, cuando todavía estaba viva, encima de una columna, para consolarle y animarle a perseverar en lo que hoy es Zaragoza. Esta es hoy la advocación de la Virgen del Pilar. Con el ánimo de María, Santiago siguió evangelizando. No se sabe el tiempo exacto que habría pasado en España, lo que sí se conoce es que volvió a Judea, pues según relatan los Hechos de los Apóstoles, murió allí mártir por orden de Herodes Agripa.
¿Evangelizó Santiago España?
Luis Antequera, divulgador histórico y colaborador de ReL, realizaba un resumen en su blog alojado en esta página sobre los documentos que hablan de la presencia de Santiago en España: “Si hemos de juzgar por lo que dice el Nuevo Testamento, el único de los grandes protagonistas del primer cristianismo cuya presencia en España consta es Pablo, que despide su Epístola a los romanos con las palabras “cuando me dirija a España” (Ro. 15, 24).
Y sin embargo, es tradición muy consolidada que, efectivamente, Santiago visitó nuestro país, comenzando su evangelización. Entre los testimonios escritos, existen muchos y muy antiguos, -Dídimo el Ciego, San Jerónimo, Teodoreto-, que atestiguan que alguno de los apóstoles sin especificar, predicó en España.
Con referencia explícita a Santiago, el más antiguo tal vez sea el recogido por el “Breviarium apostolarum”, escrito hacia finales del siglo VI o principios del VII en el sur de Francia o en el norte de Italia. El latinista Manuel C. Díaz y Díaz sostiene que el Breviarium llegó a la Península Ibérica pronto, y que ya lo conocía en el siglo VII un escritor de la importancia de San Isidoro de Sevilla, el autor de las «Etimologías», la primera enciclopedia de la Historia. En el «Breviarium» podemos leer: “Jacobo [como se sabe, mismo nombre que Santiago], hijo de Zebedeo, hermano de Juan, predicó en España y lugares de Occidente; murió por la espada bajo Herodes y fue sepultado en Acaya Marmarica el 25 de Julio”.
Como se ve, en su texto se aporta ya un dato tan vinculado a la tradición jacobea como el de la fecha del 25 de julio, en que celebramos su festividad. En cuanto al sitio del enterramiento, “Achaia Marmarica” se ha querido relacionar con la forma del recinto sepulcral, “arcis marmoricis”, “arcas marmóreas”.
Algo posteriormente, en el “Comentario al Apocalipsis del Beato Liébana”, del año 776, se puede leer: “Al reinar Juan sólo a la derecha sobre Asia, y apoderarse su hermano de España […]”. La tradición dicta que en el año 829 el Obispo Teodomiro de Iria Flavia anuncia que se ha descubierto en el Campus Stellae el cuerpo de Santiago el Mayor, junto al de sus discípulos Atanasio y Teodoro.
¿Cómo murió el apóstol Santiago?
La muerte de Santiago el de Zebedeo aparece relatada en los Hechos de los Apóstoles e incluso aparece expuesta en un contexto histórico que ha ayudado a los historiadores a poder ajustar el momento de su muerte. Así en Hechos 12, 1 se dice: “Por aquel tiempo el rey Herodes echó mano a algunos de la Iglesia para maltratarlos. Hizo morir por la espada a Santiago, el hermano de Juan”. Gracias a la mención al rey de Judea se sabe que Santiago murió entre los años 41 y 44, pues fue los años en los que Herodes Agripa reinó. La tradición ha hablado de la decapitación de este apóstol, que además supuso el primer martirio de uno de los doce apóstoles.
¿Cómo llegaron los restos de Santiago a España?
Según cuenta la tradición, pues este hecho no aparece en las Escrituras, tras morir mártir, dos de los discípulos de Santiago, llamados Atanasio y Teodoro, recogieron su cuerpo y lo introdujeron en una embarcación que llevaría su cuerpo a España, siendo depositado en el lugar que hoy es Santiago de Compostela. Fue ya en el reinado de Alfonso II de Asturias cuando un ermitaño aseguró haber visto unas luces brillantes sobre un monte, lo que comunicó al obispo de Iría Flavia, momento el que se descubriría la tumba del Apóstol.
¿Cómo comenzó el Camino de Santiago?
El Camino de Santiago, el cual recorren en la actualidad más de 400.000 peregrinos al año, tiene su origen en el hallazgo de la tumba del apóstol. En torno al año 829, el monje Pelayo vio unas luminarias. Pelayo debía ser un monje o un ermitaño que atendía a la población cristiana de la zona. Pelayo informó a su obispo, Teodomiro, obispo de Iria Flavia, el cual ordenó tres días de oración y ayuno para discernir. Las luminarias apuntaban a un sepulcro olvidado en un bosque próximo llamado Libredón. Tras entrar en la tumba, Teodomiro identificó las tumbas de Santiago y de sus dos discípulos -Atanasio y Teodoro- en el enterramiento, y avisó al rey Alfonso II, el Casto, que vivía entonces en Oviedo. Hay que recordar que Galicia en aquella época era parte del Reino de Asturias. El hecho fue que Alfonso II, el Casto, acudió a Compostela desde Oviedo, siendo la que podríamos calificar como la “primera peregrinación”. Y lo cierto es que el recorrido que hace el monarca es el que hoy conocemos como el “Camino Primitivo”.
A partir de este momento, la cristiandad podrá sus ojos en Compostela iniciando las peregrinaciones y ya, en menos de diez años, en el año 837, tenemos una referencia de ellas en el conocido “Martirologio de Floro”, escrito Lyon. En muy poco tiempo, los acontecimientos se sucederán de forma vertiginosa haciendo de este lugar gallego el destino de peregrinación más importante de la Edad Media en Europa. El Papa Juan Pablo II, el 9 de noviembre de 1982, desde Santiago de Compostela, lanzó un significativo mensaje a Europa en el que hizo un llamamiento a volver a sus raíces, las cuales se han forjado a medida que se expandía el cristianismo y en el que el Camino de Santiago de Compostela fue un vertebrador: “Aquí llegaban de Francia, Italia, Centroeuropa, los Países Nórdicos y las naciones eslavas, cristianos de toda condición social, desde los reyes a los más humildes habitantes de las aldeas; cristianos de todos los niveles espirituales, desde santos, como Francisco de Asís y Brígida de Suecia (por no citar tantos otros españoles), a los pecadores públicos en busca de penitencia”.
¿Desde cuándo y por qué es Santiago patrono de España?
El mero hecho de que uno de los doce apóstoles llegara hasta la península ibérica a anunciar el Evangelio es un argumento de gran peso. A ello se une lo que supuso para España, en plena invasión islámica de gran parte del territorio, el hallazgo de su tumba en Compostela, lo que provocó la unidad y el ánimo de los cristianos para realizar la Reconquista. Tal y como recuerda el benedictino Santiago Cantera, prior del Valle de los Caídos, el culto a Santiago como Patrono de España se remonta a la Edad Media, en unión estrecha con la veneración de su sepulcro en Compostela. San Beato de Liébana le llamó “áurea cabeza de España, nuestro protector y patrono” (Himno O Dei Verbum) y Gonzalo de Berceo lo definió como “primado de España” (Vida de San Millán, estr. 422, v. 4), a la par que los reyes hispanos lo invocaban como “luz y espejo de las Españas” y los ejércitos en batalla se encomendaban a él pidiéndole su auxilio.
Desde el s. IX los reyes de la Reconquista reconocieron al apóstol Santiago como patrón de España, y establecieron el Voto de Santiago, que consistía en que las tierras conquistadas debían hacer todos los años una ofrenda obligatoria de bienes a la Catedral de Santiago, en agradecimiento por la intercesión del Apóstol. Las Cortes Españolas establecieron en 1646 que ese Voto fuese ofrenda de los reyes, príncipes y del arzobispo compostelano a la Iglesia del Apóstol, y así sigue haciéndose simbólicamente aún hoy, durante la misa solemne del Día de Santiago. Pocos años antes, en 1630, el papa Urbano VIII había declarado al apóstol Santiago único patrón de España, contra el parecer de algunos que querían que declarase también a santa Teresa de Jesús copatrona.
¿Qué papel tuvo Santiago en la Reconquista y en la batalla de Clavijo?
Es imposible separar la Reconquista española del apóstol Santiago. El descubrimiento de su tumba insufló un gran ánimo entre los cristianos, que no cesaron de invocarle en sus batallas por la fe cristiana contra los musulmanes, de ahí la profunda devoción del pueblo español al apóstol. Y en todo esto tuvo un papel protagonista el milagro que según la tradición realizó Santiago durante una batalla, la de Clavijo, que ha quedado plasmada en numerosas obras de arte. Esta batalla se habría producido en el siglo IX ante la negativa del rey Ramiro I de Asturias al pago de tributos a los musulmanes. Los cristianos fueron a la guerra y hubo numerosas bajas. Durante la noche, la mente del monarca cristiano sólo era capaz de pensar en la probable derrota. Cuando, finalmente, fue vencido por el sueño, se le apareció el mismo el apóstol Santiago, dándole ánimos para el combate. Al levantarse transmitió lo que había visto a sus hombres y fueron a la batalla invocando al Apóstol Santiago. Llegado el momento oportuno y en lo más duro del combate, apareció el apóstol a lomos de un caballo blanco, entremezclándose en la lucha, los soldados cristianos se sintieron protegidos y derrotaron al enemigo.
¿Escribió Santiago el Mayor la Epístola de Santiago del Nuevo Testamento?
No. Santiago el Mayor, mártir, patrón de España y cuyos restos reposan en Compostela, no es el autor de la Epístola de Santiago, la primera de las llamadas epístolas católicas que se encuentran en el Nuevo Testamento. Se encuentra situada tras las cartas de San Pablo y antes de las cartas de San Pedro. Consta de un total de cinco capítulos y su autor es Santiago el Menor, otro de los discípulos de Jesús, y uno de los líderes de la primera comunidad de Jerusalén.